Nade te turbe,
nada te espante.
Todo se pasa,
Dios no se muda.
Sta. Teresa de Jesús
Una vez más, dudas, sospechas y celos en un matrimonio
pero en este caso el acusado o protagonista era el marido, y la esposa fue quien ponía en tela de juicio la fidelidad e incluso la sexualidad de su esposo, ya que el caballero (según nos aseguraba ella) frecuentaba discotecas y pubs de ambiente gay, y últimamente no tenían relaciones íntimas con frecuencia.
Más antecedentes: la mujer, acompañada de una amiga, siguió a su marido sin que este se diera cuenta y lo sorprendieron entrando en una discoteca gay y tomándose una copa.
Él explicó en su primera conversación conmigo que en ningún momento supo que se trataba de ese tipo de locales puesto que no había ningún cartel que así lo indicara, y que solamente entró a beber.
Por si fuera poco, la esposa nos explicó que su marido, alguna vez, cuando vuelve a casa con dos copas de más llega a decirle a mí lo que realmente me ponen son los hombres.
En fin, y resumiendo: un caso diferente de posible infidelidad, doble vida o bisexualidad escondida.
Un caso de sospechas y celos de los muchos con los que he tenido que lidiar en La Hora de la Verdad.